Zafra Solidaria, ante la difícil situación económica que está atravesando y el aumento de personas necesitadas a las que atiende, ha organizado un festival con música en directo que se celebrará el sábado 11 de mayo en la Caseta Municipal. Una iniciativa que servirá para recaudar fondos que ayuden a afrontar los numerosos gastos de un comedor social desbordado y cada vez con más demanda.
El festival incluye la actuación de cuatro grupos musicales: Palo Seco, Cristina Sánchez y Tino González, Suzannes´s Little Band y Cuatro x Cuatro. Cinco horas de conciertos en directo al precio de 2 euros, que comenzarán a las 19.00 horas.
La presidenta de Zafra Solidaria, Nanda Sánchez, ha explicado que hacía ya tiempo que no organizaban eventos de este tipo, pero es algo muy necesario porque no cuentan con los fondos económicos que precisan para pagar cada mes los altos costes. En este sentido dijo que hace falta la colaboración ciudadana, empresarial y de las instituciones públicas para garantizar la continuidad de este servicio. Se está realizando también una campaña de captación de socios que, aunque lenta, va cumpliendo las expectativas. A partir de 3 euros al mes la gente puede hacerse socia y ayudar a quienes más lo necesitan.
REUNIÓN DE COORDINACIÓN
Ante la avalancha de personas que están pendientes de ayuda, Zafra Solidaria ha mantenido una reunión de coordinación con Cáritas y Cruz Roja con un doble objetivo. Por un lado, querían evitar que hubiera duplicidad en los servicios que se prestan. Revisados todos los listados, se ha comprobado que no hay nadie que reciba ayuda de más de una entidad, con lo cual la situación es aún más preocupante.
Por otro lado, Nanda Sánchez ha explicado que 2 veces al año recibían alimentos del FEGA (fondos europeos), que se traducía en un ahorro a la hora de comprar alimentos. Ahora, esta ayuda se prestará a través de unas tarjetas que va a gestionar Cruz Roja hasta 2025, pero que solo podrán solicitar familias con menores. Esto va a suponer que el resto de las personas irá a Zafra Solidaria y Cáritas, que ven con preocupación que no puedan hacer frente a tanta demanda. Una alarma social ante la que se debería reaccionar, según la presidenta de la ONG.